MAESTRANTE: ROBERT SOTO HATTON
EL DERECHO DE PROPIEDAD SEGÚN ARTÍCULO 51, CONSTITUCION 2010 El artículo 51 de nuestra Carta Magna consagra el derecho a la propiedad, lo garantiza y lo reconoce; la cual tiene una función social, que implica obligaciones; y que todo propietario tiene el derecho al goce, disfrute y disposición sobre sus bienes. Esta precisión confirma que el derecho de propiedad nos da plena potestad sobre ellos, e implica obligaciones por la acción de su propietario. También expresa el texto, de manera taxativa que “ninguna persona puede ser privada de su propiedad, sino por causa justificada de utilidad pública o de interés social, previo pago de su justo valor”. El mismo artículo expresa que “el estado será el promotor, de acuerdo a la ley el a la propiedad y dice en especial a la propiedad inmobiliaria titulada”; es decir, que él es el garante de los Certificados de Títulos de Propiedad. También deja claro que solo podrán ser objetos de confiscación o decomiso los bienes de personas físicas o morales, ya sean nacionales o extranjeras, mediante sentencia definitiva. Sobre este particular, se infiere que el estado es el único que tiene la potestad de la posesión de cualquier bien, si hay un interés publico o beneficia un interés social, aclarando que sobre la base del justo pago por la expropiación, a excepción de confiscaciones de bienes motivadas por resultados de actos ilícitos, debidamente amparados por sentencias definitivas, sin importa su ciudadanía.. El legislador consagra de interés social la dedicación de la tierra a fines utiles; con un objetivo principal de política social de Estado la integración de forma efectiva de la población campesina al desarrollo nacional, mediante el estimulo del cambio de los métodos de producción agrícola y su capacitación tecnológica. Esta consagración de política social, de integración de la población campesina al desarrollo nacional, al parecer está en un estado de resago , ya que no se observa el cambio de los métodos de producción agrícola, puesto que la inversión en el campo no llega y menos las titulaciones de tierras.