Hortalizas, Raíces y Tubérculos Modulo IV
LABORES CULTURALES Facilitador: Prof. Hazael Alfonzo San Fernando de Apure, Julio de 2.016
Introducción Las labores culturales son aquellas actividades de mantenimiento y cuidado que se llevan a cabo durante toda la producción de cualquier tipo de planta ya sea a campo abierto o en agricultura protegida.
Objetivos Objetivo General Reconocer las necesidades hídricas y nutricionales de los cultivos del Sub-proyecto y las actividades que se realizan para que los cultivos lleguen a feliz término. Objetivos Específicos
Determinar las necesidades de riego de cada cultivo. Determinar las necesidades de fertilización de cada cultivo. Determinar las diferentes formas de preparar el terreno para cada cultivo.
Realización de prácticas especiales en algunos cultivos.
Contenido Preparación de tierras. Riego. Requerimientos hídricos de los diferentes cultivos. Fertilización y enmienda. Aporque, poda y empalado.
Duración: 3 semanas Valor: 10% Teoría 5% Práctica
Prof.: Hazael Alfonzo Hortalizas, Raíces y Tubérculos UNELLEZ- Apure
Estrategias Metodológicas Clase Magistral Exposición de las y los estudiantes
Practicas de campo
Propuesta de Evaluación Actividad
%
Semana de evaluación
Exposición de las y los estudiantes (Formativa)
-
10
Asistencia a Practica e Informe
6
11
Prueba escrita
10
11
Prof.: Hazael Alfonzo Hortalizas, Raíces y Tubérculos UNELLEZ- Apure
Preparación de tierra. Consiste en efectuar una arada y de dos a tres pases de rastra; luego con un surcador se hacen los camellones, si es para el periodo de lluvias, las cuales deben tener una altura no mayor de 30 cm.
Época de siembra La época de siembra varía dependiendo de la zona, pero generalmente existen dos épocas: una al inicio de las lluvias y otra en octubre con el objeto de aprovechar la humedad de finales de la época lluviosa. La época seca, donde hay facilidades de riego, es el período más adecuado para la siembra de este cultivo, ya que la incidencia de enfermedades es más baja y los costos de producción menores. En el caso de tomate industrial, las épocas de siembra están comprendidas entre octubre hasta diciembre, de manera que el cultivo se coseche a lo largo del período seco
Densidades de siembra Casi la totalidad de la siembra de tomate en el país se hace por trasplante, siendo necesario producir las plántulas en semilleros o almácigos, donde éstas pasan la primera etapa de crecimiento y reciben una serie de cuidados especiales hasta ser llevadas al lugar definitivo de crecimiento. La densidad de siembra óptima recomendada para semillero está entre 3 y 5 g/m2, requiriendo entre 50 y 70 m2 de semillero para la siembra de 1 ha. Trasplante: las plántulas en el semillero están listas para ser llevadas al campo entre 18 y 25 días después de la germinación y deben tener una altura promedio de 12 a 15 cm. Siembra en campo: En el caso de cultivares para el consumo fresco, las distancias más recomendadas son: 1,20 a 1,40 m entre surcos y de 0,30 a 0,50 m entre plantas. En el caso del tomate para uso industrial las distancias varían entre 0,7 a 1,0 m y entre 0,20 a 0,30 m entre plantas.
Riego: Método y frecuencia La frecuencia o intervalo del riego se establece de acuerdo con el clima (temperatura), tipo de suelo y de la etapa de desarrollo en que se encuentre el cultivo. Los riegos en la primera fase de desarrollo, después del trasplante, deben ser más frecuentes (cada 3 o 4 días) hasta que haya una regeneración de las raíces; luego, un riego semanal es suficiente hasta el término del cultivo. Los períodos críticos de riego en el cultivo son: trasplante, polinización de la flor y maduración del fruto.
Fertilización - Es indispensable realizar un análisis previo del estado nutricional del suelo donde se va a sembrar esta hortaliza, el cual dará un inventario del estado de los principales nutrimentos en el terreno y permitirá agregar las cantidades necesarias para obtener una buena cosecha. - Estimar los índices de extracción de nutrimentos por cosecha. Se calcula que una cosecha promedio de 40.000 kg/ha, puede extraer cerca de 180 kg de nitrógeno, 60 a 80 kg de fósforo y 220 kg de potasio. -En la fertilización es importante tomar en cuenta lo siguiente: el nitrógeno debe ser aplicado en forma fraccionada hasta la primera cosecha; el fósforo y el potasio deben aplicarse totalmente al principio o fraccionarlo durante el primer mes de crecimiento. El INIA (2005) presenta un esquema práctico de fertilización en tomate: -Primera fertilización: entre siete y diez días después del trasplante cuando se hace el primer arrime de tierra, aplicar 500 kg de 12-24-12 200 kg de cloruro de potasio y 200 kg de sulfato de amonio por hectárea. - Segunda fertilización: se efectúa entre 30 y 40 días después del trasplante. Debe aplicarse 300 kg de 18-46-0 y 200 kg de cloruro de potasio. - Tercera fertilización: se hace después de la primera cosecha con 300 kg de sulfato de amonio.
Aporque, poda y empalado. Aporque Consiste en arrimar tierra al pie de las plantas para evitar el volcamiento de estas, inducir la emisión de raíces adventicias, aumentar el espacio para el desarrollo radicular, controlar malezas e incorporar fertilizantes. Se realizan dos aporques: 1.A los diez a quince días después del trasplante. 2.A juicio del agricultor, pero no después de los 50 días. Poda y empalado Estas dos labores culturales están íntimamente ligadas. Con la poda se elimina una serie de tallos o chupones que brotan en la planta de tomate a partir de las yemas laterales, ubicadas en las axilas de las hojas. Hay cuatro tipos: Poda de formación. La planta se maneja con uno o dos tallos. Poda de brotes axilares (chupones). Con excepción de los tallos productivos seleccionados, todos los chupones se eliminan para evitar que se conviertan en nuevos tallos. Poda de hojas bajeras. Cuando envejecen, se podan para prevenir enfermedades y aumentar la ventilación del cultivo y dirigir los nutrientes hacia la parte apical de la planta. Poda de flores y frutos. Para balancear el crecimiento vegetativo y reproductivo, homogenizar el tamaño de los frutos y eliminar frutos defectuosos.
Preparación de tierra. Consiste en efectuar una arada y dos pases de rastra; luego con un surcador, dependiendo la época, se hacen los camellones, los cuales deben tener una altura no mayor de 30 cm.
Época de siembra La época de siembra debe hacerse tal que la fase de floración y fructificación debe coincidir en los meses de temperaturas superiores a 18 ºC. En climas con temperaturas menores de 18 °C, se tiene problemas en la floración y formación frutos por la presencia de enfermedades como ‘Botritys’, y pudrición de fruto en el momento de la maduración y manejo de post cosecha.
Densidades de siembra Densidad de siembra (semillero) La densidad óptima de siembra recomendada es de 6 a 8 g/m2 de semillero. Trasplante Debe realizarse entre 30 y 35 días después de la germinación, cuando las pequeñas plantas estarán listas para ser llevadas al sitio definitivo de crecimiento. Al igual que el tomate, lo ideal es realizar el trasplante en horas de la tarde o en días nublados. Densidad de siembra en el campo Las distancias recomendadas para la siembra de pimentón son: 80 a 120 cm entre surcos y de 20 a 40 cm entre plantas, lo que da una población aproximada de 30 a 35.000 plantas por hectárea. En el caso de los híbridos (mayor crecimiento vegetativo) se deben incrementar las distancias de siembra a 150 cm entre surcos y 50 a 60 cm entre plantas.
Riego: Método y frecuencia La frecuencia o intervalo del riego se establece de acuerdo con el clima (temperatura), tipo de suelo y de la etapa de desarrollo en que se encuentre el cultivo.
Fertilización Como en casi todas las hortalizas, el agricultor tiende a aplicar excesivas cantidades de fertilizantes que inciden en forma negativa en los rendimientos y originan un alza en los costos de producción. Antes de hacer una fertilización lo ideal es realizar un análisis de suelos, con la finalidad de aplicar las cantidades necesarias para obtener buenos rendimientos. Recomendación, debe incorporarse entre las plantas mezclados con los fertilizantes la cantidad de 5 t/ha de materia orgánica y el fertilizantes químico depende del análisis del suelo, recomendándose aplicar el primer abonamiento con el fertilizante compuesto de 120 N - 150 P - 100 K - 100 Ca - 100 Mg kg/ha.
Aporque o arrime de tierra. Aporque Con el aporque se coloca la planta en el centro del camellón y se busca que la humedad llegue a la misma por ambos lados del surco y se produzca un mayor desarrollo radical. Se realiza aproximadamente a 30 o 40 días después del trasplante. Con estas prácticas también se logra eliminar las malezas que, en esa etapa del cultivo, compiten por agua, nutrimentos y luz.
Tutoreo Soporte o punto de apoyo a medida avanza en su crecimiento. Esto especialmente en variedades o híbridos cuya altura supera los 1.2 m de altura.
Poda La poda es poco frecuente, ocasionalmente cuando la fructificación ha pasado y es necesario obtener nuevos rebrotes.
Preparación de tierra. En la mayoría de las zonas cebolleras la preparación del terreno se realiza con maquinaria agrícola, dándole de uno a dos pases de arado y cuatro pases de rastra cruzada, con lo que se logra de pulverización del suelo para luego hacer la nivelación y surcado. Esta preparación se realiza para lograr la conformación de los llamados canteros o serpentines, característicos de las explotaciones cebolleras. La unidad de referencia para el trasplante y cosecha es el cantero, el cual está representado por 16 surcos de 18 m de largo. Esta referencia es comúnmente usada para la contratación de jornaleros.
Época de siembra
Densidades de siembra Depende en gran medida de la época de siembra, mecanización agrícola, textura y estructura del suelo. Como regla general se puede sembrar de 2 formas: Densidades intermedias Densidades altas Densidades Intermedias
Estas podrían ser por ejemplo, en doble hilera; que es el sistema comúnmente utilizado con riego por gravedad. Distancia entre camellones Distancia entre hileras Distancia entre plantas Plantas por hectárea
: : : :
0.75 m 0.20 m 0.10 m 266.800
Densidades altas El sistema de densidades altas se desarrolla en camas de siembra de 1.5 mt o 1.8 mt, poniendo 2 ó 3 pares de líneas de plantas. En el centro de la cama se dejan unos 35 cm entre las dos líneas centrales para facilitar las labores culturales y el aporque, cuando se usan 2 pares de líneas. Bajo este sistema el riego mas utilizado es el de goteo. * Distancia entre camas : 1.5 m * Distancia entre hileras : 0.20 m * Distancia entre plantas : 0.08 – 0.10 m * Plantas por hectárea : 333,300
Riego: Método y frecuencia La cebolla tiene un sistema radical superficial, por lo que el área de explotación de las raíces es muy reducido. Los riegos deben ser frecuentes, principalmente, durante el establecimiento del cultivo con la finalidad de lograr un buen “pegue”. Una humedad satisfactoria estimula la proliferación de nuevas raíces. La irregularidad de los riegos puede ocasionar la formación de bulbos dobles. Una correcta nivelación del terreno favorece la distribución del agua en el surco de la siembra.
El conjunto de tres a cinco surcos de 3 a 4 m de largo, origina la llamada madre o parcela, que viene a ser una unidad de referencia para la labor del trasplante. Se considera que una hectárea del cultivo está formada por 500 o 600 madres
Fertilización Una deficiencia de nitrógeno ocasiona plantas verdes amarillentas de tamaño reducido. La respuesta del cultivo al potasio, a pesar de que la planta lo extrae en cierta cantidad, no se manifiesta. El azufre es un elemento muy importante para el cultivo y en la mayoría de los casos se aporta en otras fuentes como sulfato de amonio. La deficiencia de cobre se manifiesta en el bulbo, donde la cubierta exterior se torna quebradiza y de color ladrillo. El estiércol, aplicado al suelo en forma incorporada, favorece una mejor estructura del terreno y aporta pequeñas cantidades de elementos nutritivos a la planta. Un plan de fertilización establece: -Debe incorporar el fósforo y potasio al momento de la preparación del suelo y 30% del nitrógeno en los primeros 15 días después del trasplante. - A los 30 y 50 días del trasplante, se aplica el resto del nitrógeno en partes iguales. Se pueden hacer aplicaciones de estiércol (10 – 15 mil kg/ha).
Preparación del lugar de siembra Preparación del terreno. Es necesario que el terreno esté bien mullido, bien aireado, sin huecos y sin terrones y con los agregados homogéneos, con el objetivo de favorecer el desarrollo radicular, la emergencia rápida y homogénea y reducir los ataques de parásitos. Se debe realizar primero una labor profunda (no deberá ser inferior a 25 cm.), incorporándose el abonado de fondo, seguida de un escarificado profundo, en la que se surca el terreno dejándolo a una distancia de 0.5-0.7 m. La época de hacer estas labores dependerá de las características de la zona de cultivo y de la planta que preceda a la papa si hay una rotación de cultivos. La profundidad de siembra deberá estar en torno a los 7-8 cm
Épocas de siembra
ESTADO
SIEMBRA Inicio (Meses)
ARAGUA
Nov-Dic
CARABOBO
Nov-Dic
MERIDA
Feb-Abr
TACHIRA
Feb-Abr
TRUJILLO
Todo el año
LARA
Todo el año
Densidades de siembra Marco de siembra: 80 - 90 cm. entre surcos y 25 - 30 cm. entre plantas Peso adecuado de la semilla: 40 - 85 gramos Población adecuada: 33.000 – 44.000 Ptas./Ha. La siembra puede ser a mano por los surcos enterándolos a una profundidad de 10 - 15 cm. Es bueno incorporar fertilizante pre-siembra antes de sembrar las papas. Abrir la surco y aplicar la fertilizante pre-siembra a una profundidad de 20 - 25 cm. y cubrirlo con poco de tierra. Después siembra la semilla y cubrirlo con tierra. Para un desarrollo rápida y regular de la planta, es esencial que la semilla sembrada encuentre inmediato un ambiente favorable con tierra húmeda y bien pegado por la semilla. Un riego Presiembra puede ser muy importante.
Riego: Método y frecuencia
Fuente: INIA 2013. INFORMATIVO N° 78. CHILE
Fertilización Es necesario destacar que no existe una dosis única de fertilización. Cada productor debería calcular su propia dosis de fertilización en función de su ambiente productivo (clima y suelo); del cultivo (variedad y manejo agronómico) y de las características propias del agricultor. Todos estos factores interactúan entre sí, determinando las variables que definen una dosis de fertilización, es decir, demanda de nutriente por el cultivo, suministro del nutriente desde el suelo y eficiencia de la fertilización.
Preparación del lugar de siembra La yuca tiene la gran ventaja de poder producirse en una gran diversidad de suelos, pero se recomiendan los de texturas livianas y deben evitarse aquellos muy pesados y con mal drenaje, donde el nivel freático sea muy alto.
La preparación del terreno depende de las características texturales del mismo y también del manejo previo a la roturación. Por lo general, en suelos de textura liviana y con malezas fácilmente destruibles, es suficiente dar dos a tres pases de rastra. Si por alguna circunstancia se utiliza un suelo pesado, se recomienda dar un pase de arado antes de rastrear. De una buena preparación depende el éxito en el control de malezas y además se facilitan las aplicaciones de fertilizantes y se favorece el crecimiento y desarrollo radical
Épocas de siembra La yuca puede plantarse en cualquier época del año, siempre y cuando exista humedad en el suelo. Sin embargo, de acuerdo con los resultados de las investigaciones del INIA Barinas, se recomienda la siembra a entrada de lluvias (abril-mayo), siendo ésta la época más aconsejable, tomando en cuenta que el cultivo aprovecha toda la precipitación necesaria para su desarrollo; la siembra de salida de lluvias tiene la desventaja de que si las plantas en sus primeros 120 días, son afectadas por la sequía, por ataque de plagas como trips y ácaros o por enfermedades como pudrición de raíces, serían afectados notablemente sus rendimientos. Marcos de plantación La distancia y densidad de plantación depende de la fertilidad del suelo, de las características de la arquitectura de la parte aérea del cultivar utilizado y del tipo de siembra si es asociado o simple; por lo general se recomiendan las siguientes distancias: 1. En suelos fértiles: 1,20 m entre hileras y 1 m entre plantas. 2. En suelos medianamente fértiles: 1 m entre hilos y 1 m entre plantas. 3. En suelos pobres: 1 m entre hilos y 0,80 m entre plantas. 4. En siembras asociadas las distancias pueden ser mayores, dependiendo de la asociación).
Sistemas de plantación En la región del piedemonte andino, el cultivo de la yuca es una explotación de pequeñas áreas y generalmente a nivel de conucos, por lo tanto se acostumbra sembrar manualmente. Cuando se trata de grandes extensiones, es necesario implantar un sistema mecanizado del cual se tiene experiencia en otras regiones del país, consistente en el uso de una plantadora-abonadora de yuca de dos o cuatro hilos.
Métodos de plantación Existen dos métodos de siembra: sobre camellones, utilizado en suelos pesados durante época lluviosa y en plano, en suelos livianos; la posición de las estacas puede ser vertical o inclinada cuando se siembra en época de lluvias, siempre dejando una porción de dos yemas fuera de la superficie. En épocas y/o áreas de menor precipitación es aconsejable la posición de las estacas horizontales, cubriéndolas con una pequeña capa de tierra para evitar deshidratación por insolación.
Fertilización Es considerado un cultivo agotador de las reservas nutricionales del suelo y exigente de los elementos potasio, calcio y nitrógeno, por lo que es aconsejable abonar para mantener la fertilidad del mismo.
Antes de recomendar un plan de fertilización, es necesario realizar un análisis del suelo para comprobar la cantidad de minerales presente.
Bibliografía recomendada Fondo Nacional de Investigaciones Agropecuarias (fonaIAP). (1995). Producción de Hortalizas. Serie B. Maracay-Venezuela. Franco Vallejo y Edgar Estrada (2004). Producción de hortalizas de clima cálido. Universidad Nacional de Colombia sede Palmira. Gobernación del Estado Zulia (2007). Curso Teórico-Práctico, Rubros: Ají Dulce, Pimentón y Yuca. Secretaría de Desarrollo Agropecuario. Programa de capacitación agrícola para el pequeño productor. Guzmán P. José E. (1990). Cultivo de Hortalizas y Frutales. Serie agrícola vegetal Nª III. CaracasVenezuela. Guzmán P. José E. (1997). El cultivo del Pimiento y el Ají. Serie agrícola vegetal Nª VI. CaracasVenezuela. Héctor Casilimas. et al (2012). Manual de producción de pimentón bajo invernadero / Editores académicos Carlos R. Bojacá, Oscar Monsalve. – Bogotá: Universidad de Bogotá Jorge Tadeo Lozano, 2012. 200 p.: il.col.; 28 cm. Matthew Biggs (2004). El Gran libro de las hortalizas. Disponible en: http://diskokosmiko.mx/sandbox/libros-de-plantas-y-arboles-17725/plantas-el-gran-libro-de-lashortalizas,53074.pdf Instituto Nacional de Investigaciones Agrícolas. (2005) El cultivo de Hortalizas en Venezuela. Maracay, Ven., 192 pág. (Serie Manuales de Cultivo INIA N° 2). Disponible en http://www.sian.inia.gob.ve/repositorio/noperiodicas/pdf/Manual_hortalizas.pdf López Mateo, Vázquez Edith y López Ramón (1995). Raíces y Tubérculos. Editorial Pueblo y Educación. La Habana. Cuba. Steve ott. (2010). Manual de cultivo de hortalizas. Como cultivar y cosechar las hortalizas de su jardín o su huerto. Disponible en: http://noriscardenas.com/wp-content/s/2015/10/Manual-deCultivo-de-Hortalizas.pdf
Ha concluido el Módulo IV. Gracias por su atención Próximo: Modulo V. MANEJO FITOSANITARIO DE LOS CULTIVOS