Joaquim B. de Souza
Clube de Autores VILLE, SC 1ª Edição 2018 Copyright ©2018 Joaquim B. de Souza
La versión original tiene: Diseño Gráfico original: Estúdio HDV (1987) Portada del libro e Ilustraciones originales: Newton Cesar Revisión original: Luis de Montemor e Anselmo Campesato En esta edición especial: Pintura de las ilustraciones: Alumnos del 4° año de la Escola Municipal Julita Alves Soares, Enseñanza Fundamental, de la profesora Sônia M. Roes. Tradutora: Valéria Cristina dos Santos Belussi Edición final: Autor.
Todos los derechos reservados. Ninguna parte de esta obra podrá ser reproducida de ningun
Ficha catalográfica elaborada por ACLEJU – Academia de Letras de Jussara PR – REG. 712144485
S725j Souza, Joaquim B. de. El Escondite del Hormigo : “literatura infantil” / Joaquim B. de
DEDICATIÓN
A todos aquellos que en la construcción del conocimiento luchan para transformar el futuro en un mundo mejor.
El Autor
JOAQUIM B. DE SOUZA presenta a los niños de todo Brasil un libro maravilloso, lleno de peligros, peripecias fuertes, en las cuales los personajes se van modificando a la proporción que descubren los nuevos significados de la vida. El ESCONDITE DEL HORMIGO es un libro escrito con lenguaje claro, objetivo, donde los acontecimientos son lo más importante. Todo el niño que lee esta obra va a pensar en su propio destino: qué hacer para ser un hombre mejor un hombre que participa del mundo y es capaz de resolver la historia. Nota del Editor Vicente Ataíde
PRESENTACIÓN Figura 1 - Professor Anselmo Campesato
En este pequeño libro, el autor, con arte y simplicidad nos brinda con deliciosas páginas impregnadas de misterio, aventura, suspenso y acción que poblarán la imaginación de los niños. Por supuesto, la narración suave y la agradable descripción de escenas en el ambiente bucólico prender el atención de los niños y adolescentes, en su incesante búsqueda del desconocido, en su misterio, en lo que hay más allá del horizonte... Para los adultos, esta lectura, además de entretenimiento cultural, podrá auxiliar el resgate de algo que hoy, tal vez no exista o no sea valorado y, a veces, ni sentido: el sabor de una fruta silvestre, el delicioso perfume de una flor, el simple olor de la tierra, del aire del campo. En fin, sería hasta sospechosa mi opinión sobre los escritos del autor, ya que de cierta forma soy un tanto cómplice de su bendito "vicio de escribir", como diría Mário (Niño) Quintana, o como diré "pecado de escribir", pues el mismo es una especie de "crea nuestra" y, sepa usted que el búho gaba su tocón, sus cachorros, etc. y tal. Sin embargo, este "toco", este "cachorro" es especialísimo. Texto (de 1995) del professor Anselmo Campesato (In Memorian).
“Un país se hace con hombres y libros”. Monteiro Lobato
Hormigo¹ estaba silencioso. Entristecido. Él quería ser um hormigón. Pero el Hormirey² – rey del hormiguero – ordenó que su deber era cuidar de los hormiguitos, pues ellos eran tan pequeños. Los hormiguitos divertianse en el hormiguero con su juego favorito: el hormigobol³. Era una broma de mucha alegría. Bastaba desarollar una semilla en uno de los agujeros que ellos mismos hacian en cada lado del campo. Los vencedores se abrazaban y gritaban contentos, mientras que los perdedores eran penalizados: debían retirar la semilla del agujero.
Figura 2 – El Hormirey, rey del hormiguero, da una lección de moral al Hormigo debido a su
Las hormiguitas formaban sus retorcidas y alegres vibraban. Hacían la fiesta. Pero no hormigobol tenía pelea también. Un o otro desentendíase cuando era herido por una jugada bruta. Esperneaban. ¡Daban picaduras! Pero la pandilla del deja de eso partieron los briguentos. Hormigo no jugaba entre los hormiguitos porque lo creían grande demasiado para jugar con los pequeños. Los hormigones no lo querían porque lo creían pequeño demasiado. Entonces, el quedaba inventando moda. Vivía subindo en los árboles. Y decía que iba construir un escondite allá en el alto solo de él. Un dia, él quería participar del juego. - Dejame ser juez del juego? – quería Hormigo. -¡No! – contestó un hormiguito.
Figura 3 - Nadie se entendía en el juego de hormigobol.
- “¡Nadie me quer!” – refunfuñado Hormigo. Y vulto aborrido para su escondite en el topo del árbol, deseando que todos los hormigones, al enfrentaren los peligrosos de la mata, en busca del alimentos, morieran. Así, todos los hormiguitos morrerían de hambre sin el alimento de los grandes. Aunque era bien temprano. Hormigo, salió de su escondite, veían los grandes preparándose para buscaren alimentos. Formaron una gran cola. El Hormirey dio los pedidos: – Nuestra viaje será peligroso – há dicho el Hormirey. – Ni todos van voltar. Los monstruos tienen atacadonos todos los veces que salíamos. Más allá los monstruos, las nubes blancas há matado muchos de nosotros. No vamos gerrear en caso de ataque enemigo. Se fueramos atacados, vamos correr por la mata y salvar el máximo de los alimentos para el hormiguero. ¡Ahora vamos!
Figura 4 - De la tapa de su escondite del Hormigo ve el Hormirey dando las órdenes a las hor
Hormigo insultaba por dentro, creía los hormigones cobarde por acataren en silencio los ordenes del rey. Y deseaba todos muertos. Entonces se empequeñecido y empezó a hablar: – ¡Ustedes son unos hormigoleques!⁴ ¡Yo soy un hormigomen!⁵ ¡No voy a cuidar de nadie! ¡No soy hormiñera! ¡Voy a continuar a hacer mi escondite! ¡Él es sólo mio! Él vênia comportandose de maneira peralta. Desobedecía, insultaba, desrespeitaba las hormiguitas, hablaba tonterías. ¡Quedou un aburrido, entrometido a sabelotado! Por eso, estaba solo. Creía que, solo lograría construir su soñado escondite. Pensaba no necessitar de ayuda de nadie. Y quedaba enojado porque no importabanse con lo que estaba haciendo.
Figura 5 - En la tapa de su escondite Hormigo sentíase solo.
Solo, no topo del árbol sentíase abandonado. Como no tenía con quiém dividir sus problemas, en el dia, lloró. Lloró alto. Lloró tan alto que todos escucharon. Pero nadie fue lo consola, temiendo sus gritos. Él insultaba los toa. Hormigo sentíase culpado por tener un cuerpo de hormigon aunque con edad de hormiguito. Y despues de sus hormigolequices⁷, ní el Hormirey daba mas pelota para él porque fue desobediente. Mas tarde, todo estaba tranquilo en el hormiguero hasta que oyeron pasos cercando. Pronto apareceron dos cazadores armados hasta los dientes. Los hormiguitos y las hormiguitas correron para dentro de la vivenda. Estaban con miedo. Lloraban en los ricones. Tiritaban de pavor.
Figura 6 - El hormiguero organiza una excursión en busca de alimentos en el bosque.
Hormigo quedó loco de contento. Se había planchado todo. Finalmente, creía que todos iban a morir. Los grandes no estaban na vivienda para proteger los pequeños. Las hormigas por cierto solas no lograrían vencer a los inemigos. Él sentíase avenged. Festejaba la muerte de todos antes mesmo de acontecer. Cada vez más, los cazadores se acercaban y Hormigo divertíase: – “¡Van morir! ¡Solo yo estoy salvo!” – pensaba Hormigo orgulloso. El tiempo fue pasando y el própio Hormigo empezó a sentir el peligro. Quedó sério, temiendo cada paso de los cazadores. Yá no hacia más fiesta. El mal que tanto deseo estaba para acontecer.
Figura 7 - Cazadores envenenando hormigueros en el bosque.
Talvez deseó tanto pensado que jamás fuera acontecer. La idea de que todo podría ser destruído por los cazadores, hizo Hormigo quedar con miedo. De repente, en pánico, Hormigo corrió para dentro de la vivienda y gritó: – ¡Salgan todos! ¡Vamos nos esconder en la floresta! – ¿Usted no lo sabe todo, por que no enfrenta los cazadores? – preguntó un hormiguito. – ¡Es!!! – gritaron todos. – ¡Cayan fuera! – habló bien fuerte Hormigo. Empezó entonces desesperado empuye todos para fuera de la vivienda, no se importanto con la desconfianza de los hormiguitos.
Figura 8 - Después del gran susto el hormiguero se organiza para reconstruir una nueva vivie
Dispersos corrieron para la floresta. Las hormigas llevaron los horminenés⁸ que aún no sabian andar. – ¡Vamos, todos yuntos! – berró Hormigo otra vez. Hormigas, hormiguitos y hormiguitas yuntaronse en la mata y observaban traquilo los cazadores acercándose. – ¡Hormigas! ¡Maldito hormigas! – esbravejó un cazador. Y abrió una bolsa de caza e cogió el polvo de nuben blanca y propagación sobre la vivienda. – ¡Ese tóxico va dar un jeito en esas hormigas! – habló con rabia el otro cazador. Y después que destruiron todo, seguiron en frente desapareciéndo en la floresta. Todos lloraban vendo la vivienda destruída el olor fuerte del tóxico hizo mal a algunos hormiguitos que morrieron..
Figura 9 - Hormigo ya por otras bandas se asusta con los champiñones de plata.
– ¡Vamos protegermos! – habló Hormigo. Cuando los grandes llegaron y han visto todo destruído lloraron como pequeños. – ¡Fueron los monstruos! – lastimó Hormirey. Poneron en el suelo las hojitas que trajisten en las espaldas. Pararon inconformados viendo la desorden. Lastimaron el mal de los monstruos. Pero, de repente, oyeron un berro: – ¡Ei, estamos aquí! El Hormirey miró en la dirección del berro y vió la família en el alto de una árbol. Con alegría, los grandes correron para el topo del árbol. abrazaronse todos, menos el Hormigo que silencioso há oído las alabanza dados a la pandilla por tener encontrado un sitio seguro para ocultarse. Una hormiguita, timidamente, acercóse del Hormirey y Habló con su abuelita con delicadeza:
– ¿Por que no abrazó el Hormigo? – ¿Ese descarado y desobediente? – se irritó el Hormirey. Todos, temendo la cólera del Hormirey, quedaron en silencio. Pero la tímida hormiguita no se contuvo: – ¡Él nos salvó! ¡Ese escondite es aonde él juega! Hormirey, de ojos abiertos, mudo. Hormigo, si decir una palavra siquera se salía cuando fue seguro por el Hormirey que preguntó: – ¿Usted tiene certeza que todos podremos viver en esta vivienda? – ¡Sí, claro que tengo! – contestó Hormigo, abrazando el Hormirey. La alegría tomó cuenta de todos, por eso cortaban hojas de los árboles y jugaban sobre el Hormigo y el Hormirey, saludándolos en una gran fiesta. Hormigo pedió desculpas el Hormirey por haberlo desobedecido y entendeó cuán importante es su presencia entre los pequeños. Alegres y cantanto, trabajaban todos para aumentaren el escondite del Hormigo, pensando en transformálo en la vivienda de todos, bien en el topo del árbol, en la esperanza de reconstruir un hormiguero más guapo que antes.
FIN DE ESTA HISTORIA
ILUSTRACIONES ORIGINALES PARA PINTURA
Ilustración: Gisele (del próximo libro Las Aventuras de los Antares)
Notas
[←1] Hormigo no es un género para determinar la categoría del animal, sólo nombra al personaje.
[←2] Hormirey es la aglutinación de las palabras. “hormiga” e “rey”, sirviendo tan sólo para dar nombre a un personaje.
[←3] Hormigobol es la aglutinación de las palabras “hormiga” e “futból”, sirviendo tan sólo para dar nombre a un evento.
[←4] Hormigo es la aglutinación de las palabras “hormiga” y “moleques”.
[←5] Hormigomem es la aglutinación de las palabras “hormiga” e “homem”.
[←6] Hormiñera es la aglutinación de las palabras “hormiga” e “babá”.
[←7] Hormigolequices es la aglutinación de las palabras “hormiga” e “molequices”.
[←8] Horminens es la aglutinación de las palabras “hormiga” e “nenês”.