Salud Mental Y Género - Debora Tajer 1l1v1o

VIOLENCIA Y SALUD MENTAL DE LAS MUJERES

-“Violencia y salud mental de las mujeres” en libro “Políticas Públicas, Mujer y Salud”, Edic. Universidad Nacional del Cauca, Colombia (en prensa) Débora Tajer1 Voy a hablar de la violencia y la salud mental de las mujeres. Quiero contarles en primer lugar que hago parte del grupo de Salud mental y género en la Argentina y dentro de ese marco he trabajado desde hace 7 años un poco el psicoanálisis de género2, así que lo que van a escuchar es lo que hemos venido trabajando en este tiempo, aclarando eso sí que cuando una habla no solamente está presente la voz propia sino las voces de las otras personas con las que una ha construido y que han colaborado para armar la cabeza o las ideas que una tiene. Bueno vamos a lo primero ¿Qué es la violencia? Seguramente definiciones deben haber un montón pero me pareció importante, si vamos a hablar desde el punto argumental, traer alguna definición, entonces sería “Todo tipo de interacción humana en la que se produce un daño a otro/a para la consecución de un fin” 3. Y hay diferentes tipos de violencia de acuerdo cuales sean los/as actores/as y los fines. ¿Qué es la violencia de Género? Ustedes saben que a partir del año 93 en la Convención para erradicar todas las violencias de género, realizada en Belem Do Pará, Brasil, ahí se define como “todo acto de violencia basado en la diferencia de género que produzca sufrimiento o daño físico tanto sexual como psicológico”, y también me parece importante, como señala la Convención, resaltar lo que dice respecto a que violencia no sólo es la producción del hecho sino la amenaza, vivir en un estado de amenaza también es un hecho de violencia, y también la coacción o privación de la libertad. La privación de no poder hacer mi destino , mis proyectos o lo que yo estoy llamada a hacer, eso también es un acto de violencia. ¿Qué es violencia invisible de género? Es uno de los temas más importantes para poder pensar la salud mental con perspectiva de género, porque mucho de lo que trata la salud mental desde ésta perspectiva, son cuestiones en su mayoría esencializadas e invisibilizadas 4, es decir que existe la desigualdad en el dinero, en el poder, en las responsabilidades domésticas y las opciones domésticas, en la realización personal y eso no 1

Clase impartida en el Curso Internacional “Políticas Públicas, Mujer y Salud” del Proyecto Universidad Itinerante de la Red de la Salud de las Mujeres Latinoamericana y del Caribe. Popayán, Colombia 6 y 8 de noviembre de 2003. 2

La autora aquí se refiere tanto a su trabajo desde hace 15 años en la Cátedra Introducción a los Estudios de Género de la Facultad de Psicología de la Universidad de Buenos Aires, Argentina como así mismo el hecho de haber sido Co- Fundadora y Sub-Coordinadora del Foro de Psicoanálisis y Género de la Asociación de Psicólogos de Buenos Aires (94-00) 3 Según definición de Saúl Franco en su libro“El Quinto: No Matar. Contextos explicativos de la Violencia en Colombia” Ed. Tercer Mundo; Bogotá, Colombia, 1999 4

Fernández, A.M. - Giberti, E.: “La mujer y la violencia invisible”.

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Ed. Sudamericana, Bs.As., 1989

se hace con un revolver en la cabeza, se hace mediante la socialización de hombres y mujeres, para que pensemos que lo que nos corresponde es andar por la vida de ese modo “naturalmente” femenino o masculino, entonces esto es violencia invisibilizada, por qué?, porque ha sido naturalizada e interdicta y así prohibida de ser vista, y es algo que aparece como un orden de los hechos de la naturaleza y hay que desarmarlo para darse cuenta que eso es violento porque es una orden de apropiación del capital simbólico5. Qué pasa con las mujeres? hablo de la identificación, del efecto subjetivo de la violencia simbólica en la salud mental de las mujeres desde una perspectiva de género - fue algo que Argentino se ha trabajado mucho que en este caso se define como ligado aun ideal construido en relación alos valores necesarios para garantizar la reproducción social, entonces se define como sano mentalmente, aquel que sigue los parámetros que el Estado nos propone trabajar, y los que no asumen este tipo de conductas son locos o desviados con respecto a los criterios de salud mental establecidos. La perspectiva de género en general, aplicada al campo de la salud mental, es darse cuenta cómo ese ser humano que describe la salud mental no es cualquiera sino que es un ser humano situado, y por lo general que el mismo patrón, desde el cual se mide a todos los sujetos humanos, construye esa abstracción y en realidad es un varón, blanquito, y de clase hegemónica , y con respecto a éste que es una entelequía, se forja el ser humano de la modernidad y bajo el dispositivo de salud mental el mismo se convierte en modelo de salud, por qué? porque los dispositivos de salud mental se crearon en la modernidad y la modernidad ha naturalizado, ahistorizado y valorizado como científico una forma de ser humano que es en realidad una construcción histórica fruto de un momento particular ¿me siguen bien? Qué es lo visible en la construcción de la salud mental tal como la conocemos? lo visible es el ser humano como activo autónomo con la descripción de autonomía de la modernidad, esto es mas allá de los otros, el sujeto que se construye asimismo y no necesita de nadie para hacerlo. Por otro lado ¿Qué es lo invisible desde estos criterios hegemónicos de salud mental? tomar en cuenta al otro, porque a uno/a cuando le enseñan a hacer evaluaciones diagnosticas en salud mental no le enseñan que la persona que no toma en cuenta al otro no está muy bien , y tampoco la posibilidad de la autoestima, y todas estas cuestiones con sus altibajos y con sus dificultades, son las promovidas en la población femenina tradicional, y no en la población masculina, son cuestiones exactamente invisibilizadas dentro de lo que se considera un ser humano sano mentalmente. Entonces se nos educa para que seamos de determinada manera pero la medición de nuestra salud mental, es de otra manera, por lo tanto las mujeres normales, esto es las que acatamos las normas y somos buenas chicas, terminamos siendo un poco locas para los parámetros de salud. Freud en particular ha definido como criterio de salud mental identificar la capacidad de un sujeto de trabajar y amar. Los criterios para nosotras de salud mental deben ser: identificar la capacidad de trabajar y amar. Ahora, 5

Fernández, A.M.: “La Mujer de la Ilusión”, Ed. Paidós, Buenos Aires, 1994

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de que se trata evaluar la capacidad de trabajar y amar en las mujeres? 6 Hace un rato Amparo les contaba cual es la trama del amor romántico del cual nosotras hablamos y cual es el lugar en que estamos situadas las mujeres para poder conseguir un amor posible 7, por lo tanto que esto sea un criterio, porque esto no es un criterio abstracto el que las mujeres y varones tenemos semejantes oportunidades y posibilidades de conseguirnos un amor posible y esto tiene que ver con cómo se nos subjetiva, qué se nos pide y en qué marco de posibilidades lo podemos hacer. Ahora este es un tema muy complejo, porque el campo de la salud mental trabaja fundamentalmente con el sujeto en relación con la realidad y la posibilidad que el sujeto tiene de tener un juicio de la realidad que le permita manejarse en el mundo. Qué pasa entonces cuando la realidad está construida de manera injusta para el sujeto? y esto es un punto muy importante, porque la vivencia del sujeto también es que pasa que yo no me adapto?, hay algo malo en mí?, no es tan fácil darse que cuenta que no me adapto a situaciones que son malas e injustas para mi, por lo tanto muchas veces no adaptarme es lo mejor que yo puedo hacer. De otro lado ayer también hablaban sobre el tema de la amistad de las mujeres, Freud planteó en un texto, ya casi al final de su vida, la cuestión del malestar en la cultura, él lo definía como el precio que teníamos que pagar todos los sujetos para poder estar en sociedad, el precio positivo que tenemos que pagar todos los sujetos para poder estar con otro porque somos sujetos sociales, y él decía que debemos abandonar algunos placeres egoístas para poder estar con los otros, esto produce un malestar, pero es un malestar necesario para poder vivir con los demás. Ahora que acontece con el malestar en la cultura de los grupos sociales con menores ventajas? Hay malestares en plus de los necesarios para estar en sociedad? Freud en ese texto habla del costo de mas que muchos grupos sociales fundamentalmente los pobres y marginales pagan en la cultura y que eso afecta su voluntad y capacidad de adaptarse a las normas que por supuesto los desfavorecen, no en tanto sujetos individuales sino en tanto sujetos pertenecientes a un colectivo, pues de eso se trata el texto, de los costos al “egoísmo” por vivir con otros. Ahora Freud no dice que las mujeres estemos ubicadas ahí simplemente, porque para él, el problema de las mujeres no era un problema social, sino un problema de efectos psíquicos de la diferencia sexual anatómica, entonces los problemas que nosotros llamamos de género, eran un problema del efecto en la psiquis de la “natualeza biológica”, entonces estos conceptos fecundos de Freud en el campo de la psicología social no fueron aplicados al tema “mujer”, pero nosotras en este momento si lo utilizamos y decimos que vivir, trabajar y amar en el marco del patriarcado produce un malestar enorme y en plus a las mujeres. ¿Cuáles son los desafíos actuales en el campo de la salud mental de las mujeres?, Primero, el hecho que las mujeres tenemos un lugar social Tajer, D. “Subjetividades sexuadas contemporáneas. La diversidad posmoderna en tiempos de exclusión” en Meler, I. y Tajer, D. comp. “Psicoanálisis y Género. Debates en el Foro” , Lugar 6

Editorial, 2000, Bs.As. Argentina 7 Tajer D., "Mujeres y Varones. Lo ideal y lo posible. Lo semejante y lo diferente". Ponencia Foro de Psicoanálisis y Género APBA 28/9/00

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diferente, y lo diferente es lo que esto implica, que las mujeres somos sujetos y esto es una novedad histórica, que no seamos consideradas no bienes de intercambio, ni botines de guerra sino sujetos, esto implica un desafío para la salud mental, precisamente porque la salud mental se abre como campo, porque está armada para pensar una relación entre sujeto y objeto, en un momento histórico donde todavía nosotras eramos consideradas como objetos de “cama y mesa”; no quiere decir que ahora estemos en el mejor de los mundos, pero sí ha habido un avance muy importante y luchamos día a día en lo cotidiano para que se nos considere sujetos de derecho, entonces ya por esa misma lucha y esa misma tensión que existe, ya es una base diferente para pensar de que se trata el escenario actual de las historia de las mujeres. Por otro lado uno de los desafíos actuales es incorporar el criterio de ciudadanía al campo de la salud mental, esto es para poder pensar, como se dijo hace un rato, cuál es la base de la cual parte cada cual, para poder formar mujeres y varones, ya que no tenemos el mismo grado de ciudadanía y esto no tiene que ver solamente con la cantidad de derechos políticos y legales que tengamos, sino además los aspectos internos o subjetivos de la construcción de ciudadanía esto es cómo nos reconozcamos y cómo nos asumimos; entonces el asumirse ciudadana es un problema del campo de la salud mental 8. Uno puede decir que gran parte del trabajo de los que estamos en el campo de la salud mental con perspectiva de género, no es solo curar sino permitir que los sujetos, en este caso las sujetas mujeres construyan su ciudadanía, y poder revelarle cuáles son los obstáculos que tiene cada quién para instaurarse en un lugar de autonomía en su propia vida, para decirlo de otra manera, para poder apropiarse de los recursos que existen en la viña del señor para tener una vida mejor. Este es uno de los objetivos de la perspectiva de genero en el campo de salud mental. Su tarea entonces es fundamentalmente trabajar en el campo de lo subjetivo, cómo lograr el empoderamiento y autonomía en las mujeres y en los varones, cuando los miramos y trabajamos con ellos desde una perspectiva del género, lo que tenemos que hacer es ayudar a deconstruir la subjetivación para el poder y la hegemonía, desarmarles ese constructo.

Salud Integral. Cómo introducir el concepto de salud mental en un concepto más amplio como es el de la salud integral? Lo que hago no es tomar la definición de la OMS, para al cual se trataría de un agregado de la salud mental, más la salud física, más la salud social, nos daría una salud integral, sino que quiero colocar otra idea y ahí estoy en el campo de lo que es la salud colectiva, en realidad hablaría más de la articulación de los efectos biológicos, subjetivos y sociales en el campo de la salud; es decir esto no es una sumatoria de los sicólogos, más los médicos, más los sociólogos y antropólogos que se dedican a la salud, sino que es un forma diferente de mirar la salud, que indica entenderla como una interrelación; y ahí voy al tema de relación entre determinación y escenario, porque muchos de los 8

-Tajer D. "Varones y Mujeres. Generación y Género en el trabajo de Salud Mental". En Revista La Ventana N° 16. Centro de Estudios de Género, Universidad de Guadalajara, México, 2003

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problemas que tenemos en la salud se pueden desarrollar, tanto en el escenario del cuerpo, como en el escenario del psiquismo, pero la determinación muchas veces no es del mismo campo en el cual se producen9. Qué quiero decir con esto? los problemas psicológicos no solamente son psicogenéticos, no surgen solamente del siquismo, sino que muchas veces los problemas de salud del psiquismo se derivan de luchas en el campo de lo social o de problemas, trastornos a nivel de lo ideológico, pero que tienen impacto y que el escenario en el cual se producen es el escenario visible y por lo tanto las herramientas propias que debemos utilizar son las propias del campo en el cual esto se evidencio. Pero el campo de determinación no necesariamente es ese, entonces este es un punto muy importante en términos epistemológicos, para ver como profesionales cómo nos colocamos en esta cuestión de la salud integral, ahí donde nuestro marco disciplinario nos permita actuar en cada uno de los escenarios y operar con las herramientas correspondientes al campo desde el cual operamos. En uno de los primeros cuadros patológicos registrados, de los que en ese momento eran de los estudios de la mujer en el campo de la salud mental, fue la depresión10 y el texto dice que acontece fundamentalmente en las mujeres, de mediana edad que han armado su vida de acuerdo al modelo, esto es que han proyectado su desarrollo de tiempo y su autorealización en la crianza de los hijos, por lo tanto desde el momento en que los hijos empiezan a ser independientes estas mujeres se deprimen. Ahora, esta depresión es producto de un trastorno psicológico, o es producto de una construcción que está instaurada en el desarrollo y en la subjetividad de cada una de estas mujeres que reproducen esta forma de vivir? Que esto sea algo determinado por lo social, no implica que no sea subjetivo, lo es, porque para que una mujer pueda desear ese proyecto tiene que vivenciarlo y tiene que querer hacerlo, puesto que su afecto, su estima de sí está puesta en todo su proyecto, por lo tanto termina siendo psicológico, por tanto se deprime, precisamente donde se termina esa forma de proyecto y tiene que reorganizar su economía psíquica, para poderse desarrollar de otra manera, entonces esto da una sintomatología psicológica, pero esta no está determinada psicológicamente, no es un trastorno psícogenético, sino que es algo que se produce en el escenario de lo psíquico, pero su determinación es social y así pasa con gran parte de la psicopatología si la revisitamos desde esta perspectiva. Entonces hablaba de la determinación, diferente de la idea del escenario, esto de la determinación quiere decir, cuál es el orden de la causación, de dónde viene la causa o las causas y por otro lado de donde se producen. ¿Cuáles son las ejes a destacar para trabajar en desde una perspectiva de género en salud mental de las mujeres? la autoestima, los ideales propuestos para el desarrollo de deseos. Vamos a trabajar con respecto a la autoestima, cómo organizamos generalmente las mujeres nuestra autoestima? quiero decir nuestro amor a nosotras mismas, esto es lo que quiere decir el concepto. Qué es lo que tengo que hacer para 9

Tajer D. “Género y Subjetividad en el riesgo de enfermedades cardiovasculares en adultos jóvenes” Tesis de Doctorado en Psicología, UBA (en proceso de escritura) 10 Bart P. “Depresión en las mujeres de mediana edad” en Mujer, Locura y Feminismo. Ed Dédalo, Madrid, 1979

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verme y sentirme bien? fundamentalmente nos han educado para que la autoestima se arme en torno a valores como: ser buena, ser bella, la belleza física como valor central para unas cosas, la idea de que mujer es igual a madre; una construcción histórica de la modernidad que hace que pensemos que si nosotras no somos madres, no somos mujeres y tenemos que andar pidiendo disculpas, y justificarnos porque no somos madres; por el otro lado esto se ha complejizado porque tenemos más cosas, entre ellas ser trabajadoras, además de lo otro, y la participación comunitaria, entonces todas esas cosas hacen parte de lo que tiene que hacer la mujer para quererse a sí misma. Como lo decíamos, nos educan para que nuestro deseo esté conformado en relación con ser un objeto erótico, nos tenemos que conformar para que nos deseen eróticamente, y este termina siendo nuestro deseo, que no está nada mal, pero qué pasa cuando solo esto ocurre? esto determina que es más importante que nos deseen, que lo que deseamos, entonces terminamos eligiendo pareja a veces solamente porque el otro nos desea y no porque nosotras lo deseemos. Por otro lado nos enfrentamos al no desarrollo o inhibición de otros deseos, ¿Cuales? El deseo hostil por ejemplo. El deseo hostil síquicamente es muy importante porque es lo que nos permite diferenciarnos de otras, entonces las mujeres por lo general tendemos más a no discriminarnos (diferenciarnos) de la otra , por eso a veces no soportamos que unas se destaquen más que otras y eso es como una traición a las mujeres y una marca, una diferencia que a veces es considerada como un “crimen de lesa humanidad de género”. Por ejemplo, yo soy profesora de la facultad de psicología de la Universidad de Buenos Aires, donde el 80% de las matriculadas son mujeres, entonces qué es lo que pasa? Cómo se ve esto en la práctica por ejemplo, qué hacen los estudiantes para trabajar en un grupo, respetando el porcentaje, si son 5 mujeres o 4 mujeres por 1 varón, entonces muchas veces las chicas soportan menos que una de las jóvenes sea la que va hablar en público y eligen al varón, pues les es más fácil de soportarlo como líder o como representante que a fulanita “que es como yo”. Esto quiere decir que las mujeres no seamos hostiles, mas bien lo contrario, porque todos los sujetos humanos tenemos algo de hostiles, por ejemplo cuando odiamos a alguien y no lo manifestamos, a la manera de ese “te odio” de los grandes escenarios de los culebrones o telenovelas, por no poder decir abiertamente qué es lo que queremos, qué deseamos, qué no queremos y qué es lo que no abandonamos es el precio que pagamos las mujeres por tener que ser buenitas desde chicas y no poder madurar nuestra hostilidad que permanece infantil y poco refinada. Por otro lado tampoco se promueve en las mujeres el deseo de saber, el deseo del poder y el deseo de ser mujeres y ahí voy a explicar un poco que quiero decir con eso. El deseo de poder porque las que están más esclarecidas, y las que tienen más tiempo en esto saben que cuando hablamos de una perspectiva del género del poder, no estamos hablando del poder como dominación solamente, sino que hablamos del efecto más amplio del poder que es la potencia, la capacidad de hacer, entonces esto no solamente es lo que no se nos permite desarrollar: nuestro poder de dominación. Si lo queremos, si nuestra potencia, nuestras posibilidades, el poder desarrollar a lo máximo lo que somos y las posibilidades que tenemos, aunque la habilidad que sì se nos permite es la de ponernos en el

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lugar del otro, esto lo podemos casi siempre y a veces de más, y lo que no se promueven son las tareas predeterminadas, los tiempos establecidos y medibles. Esto lo notamos aún en nosotras cuando hablamos, a lo mejor nos pasamos de hablar 5 minutos y pactamos 3 minutos, es casi imposible de lograrlo y tiene que ver con eso con el no entrenamiento para ser concretas y sintéticas. Estos son los problemas de la transición, es una confusión manejar el tiempo, pero sepan que se aprende, a no perder la esperanzas!!! Cuáles son los problemas del momento actual? Hay que decir primero que estamos en momentos de transición, estamos en momentos de pasaje desde las modalidades más tradicionales hasta las modalidades más modernizadas y más innovadoras. Como estamos en un momento de transición tenemos lo nuevo y lo viejo dentro de nosotras, no solamente nos peleamos por con los otros, sino que dentro nuestro tenemos todavía áreas heterónomas y áreas autónomas, como decía hace un rato Amparo, convivimos con la mujer ancestral y al mismo tiempo con la chica moderna, la sixtie, la hippie de los 60s, la muchacha libertaria, la de ese espíritu que se empezó a desarrollar a partir de los 60s, que por suerte lo seguimos teniendo, entonces ya somos varias generaciones de mujeres dentro del movimiento, lo que hace que cada generación sea diferente, por lo que ha recibido y los problemas con los que se enfrenta son otros, y eso es también parte del avance y entonces los problemas de la transición son muchas veces lo que queda como impacto en el campo de la salud mental. ¿Cuàles son las angustias actuales? temor a dejar de ser femeninas, vaya uno a saber qué es lo femenino, pero nos da muy duro la identificación del trote de ser ama de casa. Por el otro lado el sentimiento de culpa de las madres que trabajan, porque la construcción que tenemos nosotras de la maternidad en la modernidad fraguada es el modelo de la familia nuclear, las mujeres en la casa cuidando todo el tiempo a sus hijos, entonces si el ideal es ese y así nos educaron, y al mismo tiempo queremos trabajar, el problema que tenemos todavía es que nos armamos un modelo ideal, entonces nos medimos con el ideal de antes, y entonces necesitamso armarnos un modelo alternativo. Sufrimos entonces el síndrome de la supermujer porque queremos ser lo mejor posible en “todo” por la coexistencia y sumatoria de los ideales de lo viejo y lo nuevo es otro peligro. Yo diría que parte del tema es seguir sumando sin darse el tiempo de elegir lo que se quiere con los pro y contra que eso conlleva, sino nos armamos un paraíso ideal que nos hace suponer que alguien puede gozar solo de los pro de cada “mundo”. Problemas específicos relacionados con la salud mental y la adolescencia Cuando en la adolescencia empezamos a registrar los primeros problemas en salud mental desde una perspectiva de género en las mujeres, el tipo de consulta que tenemos es anorexia y bulimia. Las anorexias y las bulimias que se producen en la mayor parte de los países corresponde al 98% de mujeres, por eso es un problema de género y tiene que ver con el impacto de estar muy delgadas, el impacto del modelo de las super modelos dentro de la construcción de la autoestima, porque no es un problema solamente externo sino que las niñas son subjetivadas, y nosotras de alguna manera, porque tenemos que ser delgadas, pero nuestra autoestima, por razones de

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generación y de clase, no ha sido fraguado con el modelo de esta generación de adolescentes, por eso muchas vivimos a dieta pero no somos anoréxicas ni bulímicas. Y no lo somos porque nuestra autoestima está fraguada en otros valores, nos salvamos por generación y muchas de nosotras también por clase. Otro tema importante relacionado con la adolescencia es el de las fobias, por qué? ¿qué es? La fobia es un miedo extremo, esto es una fobia no es nada más que esto, y la adolescencia es un momento de transformación y es el momento de adquisición, en la mejor de las formas, de autonomía, del comienzo de la adquisición y la fobia es el precio que pagan las mujeres por querer ser independientes, pero al mismo tiempo vivir en un histórico social que no lo permite, pues se quiere que sean libres pero que estén en la casa, que sean activas pero no tanto, entonces en vez de ponerles un bozal y poner una correa a las adolescentes, lo que se hace es que se les envían mensajes contradictorios que funcionan como correas y bozales simbólicos y esto tiene como efecto las fobias. Niñas temerosas que tienen miedo por ejemplo, de salir, miedo de relacionarse con los chicos, miedo al o, miedo a un grupo de cosas. Qué pasa con las adultas jóvenes? Presentan miedo a ser independientes porque les aparece como terrible estar renunciando de alguna manera al tema de la mujer ancestral, lo cual piensan que solo puede traerles soledad. Parecería que solo tienen dos opciones: ser lo que otros quieren o ser una misma, pero sola. Esto produce muchas veces agorafobia, que es la fobia a deambular por el mundo externo, con lo cual el remedio suele ser andar de la casa al trabajo y del trabajo a la casa, tener miedo a la noche, tener miedo a salir, que como la palabra lo dice: agora es el espacio del público, entonces será como la fobia pública. Y el otro tema, que es un tema pesadito, es el masoquismo, o lo que genera dominación, que es precisamente el efecto de la libido de haber sido subjetivada en un histórico social patriarcal. Ustedes saben que el masoquismo está descrito como una modalidad deseante por la cual una persona tiene placer mediante el dolor, mediante la humillación, porque el masoquismo no solamente es físico, sino moral, por ejemplo el engancharse con el que le hacen sufrir. Ahora esto no es “natural” de la femineidad, aunque algunos dicen que si, pero si uno desmonta la “naturalidad”, se nota que lo que hay es una construcción del cuerpo erógeno como un cuerpo que se sensualiza con el dolor. Las disfunciones existen desde el momento que existe la idea de que hay que gozar la sensualidad, por eso la eyaculación precoz no era un problema cuando las mujeres no pensabamos que podíamos gozar, ni pensábamos que teníamos derecho, no quiere decir que no existía, sí existía pero no era un problema. Para que hay problema tiene que haber sujeto. Por eso para los intereses de un eyaculador precoz lo mejor es contar con una mujer poco sujeto que se crea que ella es el problema porque “tarda mucho” o es frígida. El problema es ahora cuando también queremos ser sujetos, entonces cuando queremos disfrutar nos encontramos que tenemos un problema para disfrutar y parte de los problemas para disfrutar es que nos han educado para ser objetos y ahora queremos ser sujetos, entonces las disfunciones son precisamente cómo el cuerpo reacciona a esta tensión. Cuál es el tratamiento? Uno de los peligros de hablar cual es el efecto de la salud

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mental en los diferentes ciclos de la edad, es que terminamos siendo psicopatologas, entonces trabajar el género en salud mental no es describir mejor las cosas, sino que es describirlas para cambiarlas, no es una nueva nomenclatura, sí es entender otra manera de decir, por ejemplo el cambiar y hablar de masoquismo, hablar de lo que genera la dominación, no es solamente ponerlo u nombre más bonito, es entender de otra manera la determinación; si yo la entiendo de otra manera voy a actuar y a trabajar de otra manera , es ponerle otro nombre para que responda mucho más a cómo yo pienso que la cosa es, para poder actuar, lo que estamos tratando de trabajar aquí es precisamente es cómo sufrimos, o cómo se nos arma la cabeza y el alma a partir de lo que hemos sido educadas. Yo lo que estoy planteando acá es precisamente eso, o sea cómo nos impacta en forma de malestar esto que nos han dicho que tenemos que hacer y ser, pero no solamente entendiéndolo, sino como me defino a mi misma. Quien soy? yo soy yo así, o soy la mujer rebelde que ahora no le hago caso a todo, eso sin ver cuál es el impacto, cuáles son las cicatrices de la dominación, de todo eso, entonces con qué me la tengo que ver cuando quiero ser diferente? puedo decir que yo no solamente quiero ser ama de casa, pero puedo serlo también porque cocino rico y hago cosas que a mi me gustan, de hecho yo no plancho porque no me gusta, pero me encanta cocinar y tengo derecho a eso y por qué no? Y por el otro lado, quiero ser una mujer que está en lo público y quiero estar acá con ustedes y quiero ir a mi universidad y sí, pero muchas veces el histórico social lo que ha hecho es tratar de construirnos como mujer que solamente tiene que estar en la casa; lo que me pasa es que aunque yo quiera otra cosa, yo estoy acá y sufro, entonces digo ¡y qué me va a pasar? no me va a querer? y que mis hijos esto! y entonces de esto estoy hablando, estoy hablando de todos los desafíos que tenemos cuando queremos vivir diferente, pero también todos los problemas, porque el dominio ha impactado en nosotras, aún cuando yo digo que las amas de casa están desvalorizadas, lo que digo el cambio de lo histórico social. Lo que pasa es que las que han hecho bien los deberes, nadie las valora, son invisibilizadas aunque están en la casa haciendo todo para que todo funcione. Por último me pidieron que hable de los efectos específicos que la violencia fáctica, de hecho, no solamente simbólica tiene sobre la salud mental y ahí voy. Primer efecto en la salud mental de la violencia, porque lo primero que la violencia hace es inhibir el pensamiento, la violencia es un hecho tan fuerte o es una amenaza tan fuerte que lo que hace es inhibir a las personas de pensar con autonomía de criterio y valores . Me hace pensar que la única salida es la contraofensiva y hacer todo en el orden de la misma línea, de lo que otros hacen, si me pegan tengo que pegar, si me matan tengo que matar, ese es uno de los primeros efectos: tanto en hombres como en mujeres, pero yo les dije al principio de la exposición, hay violencias específicas de género. Lo que pasa es que la violencia en las mujeres no solamente hay que pensarla como un efecto de algo que se produce, sino que se produce en un sujeto que ya ha sido armado por la violencia simbólica que ya les plantee, las mujeres ya somos personas que tenemos problemas en el autoestima, incluso nosotras las más feministas. Les voy a dar un ejemplo, las que estamos acá hacemos cosas interesantísimas en nuestras vidas y somos luchadoras y hemos pasado por

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miles, pero tenemos poca capacidad para decir: esa soy yo y eso vale! Andamos pidiendo disculpas todo el tiempo, o andamos diciendo bueno todavía no puede esto y entonces los costos de mi vida son estos. Entonces aún nosotras las que hacemos muchas cosas y las que estamos tratando de desarrollarnos de la mejor manera posible tenemos una escasa valoración de nosotras mismas y a veces resulta raro por qué terminamos hablando excesivamente de nosotras mismas como si para valorarnos las demás debieran decir que interesante esta mujer, no nos basta nuestra propia mirada aprobatoria: Y precisamente porque no nos reconocemos a nosotras mismas, no nos autorizamos ni entendemos la importancia de la generosidad de reconocer a las otras, esto es honrar, honrar. Si yo puedo reconocer a la otra eso vale y me voy a reconocer a mí misma y esto es parte de la pactación entre mujeres, yo tengo que reconocer que la otra mujer es muy valiosa para mí y no envidiarla porque yo no puedo hacer lo que ella hace y querer destruirla. Es necesario pensarlo diferente, si ella puede yo voy a poder porque si una pudo, se puede! Con respecto a la violencia sexual específicamente cuando se da a temprana edad se pierde la capacidad de fantasear, se da la confusión entre realidad y fantasía; la violencia sexual temprana o el abuso sexual temprano en niños o en niñas lo que provoca es que estos sujetos tengan dificultad para fantasear lo cual afecta el desarrollo de una sexualidad plena en la adultez. Porque todo lo que piensan a nivel de fantaseo suponen que les va a pasar en realidad, precisamente porque les pasó en un momento donde no lo podían elaborar, porque todavía no tenían las herramientas síquicas para eso. Uno lo ve cuando hace consulta, que uno de los trastornos y uno de los efectos es precisamente ese, y uno no lo ve 20 o 30 años después, ¿Hasta que edad se va presentando eso?, siempre es más terrible cuando más temprano es el abuso, sea en niños o en niñas, esto da más disfunciones psicológicas, porque el trauma se produce en un momento en que el sujeto no está constituido. Por otro lado porque la violencia, genera tanto depresión, como problemas en el orden de la autoestima y también da psicosis; yo lo he visto en mi experiencia personal, yo he hecho la residencia de especialización de los primeros años en el Psiquiátrico de mujeres Buenos Aires, y he visto cuadros sicóticos de mujeres que se enloquecieron por estar sometidas a la violencia conyugal y familiar . Entonces una de las cuestiones que hay que hacer, cuando uno ve por ejemplo en la consulta que viene un señor muy atildado y la mujer muy deprimida y muy loca, parte de lo que hay que hacer es sacar al señor del consultorio y solo hablar con al mujer porque probablemente puede ser un cuadro de violencia; lo que pasa es que nosotros vemos a la loca o a la deprimida y no vemos cómo se produjo esa loca: por ese señor trajeado lleno de razones; esto es algo que se debe enseñar para que se pueda dar cuenta, muchas veces esto lo trabaja la gente que atiende la familia en el campo de la salud mental, como un loco no es el más loco sino que es el portador de la patología familiar o vincular y esta es otra de las maneras en las cuales vemos que los problemas psicológicos no parten de la propia psiquis, sino que son efecto de luchas que pueden ser a otro nivel por ejemplo de la violencia familiar o conyugal y dicho esto termina mi exposición. PREGUNTAS.

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Recuerdo que un texto que leía sobre conjuntos prácticos idealizados donde decía que los varones tienen como referentes a ellos mismos, y que ellos para reproducir el patriarcado tienen su referente en los otros varones. ¿las mujeres tenemos nuestro referente, en dónde, en quienes, cuál es nuestro referente? O nuestro referente lo que hace es reproducir el patriarcado, aunque obviamente el patriarcado se las ingenia para que esto sea así, pero para las mujeres que nos queremos salir , ¿cuál es el referente cuando nos salimos?

Débora: Este es un tema muy importante, es un tema que es válido no solamente para la cuestión de las mujeres sino también para todo sujeto que ha ascendido socialmente, el que pasa de clase también tiene problemas porque tiene que adquirir capital simbólico de un grupo al cual no pertenece pero del cual debe adquirir para poder manejarse en el mundo que le toca y que tuvo que acceder, entonces, ¿qué nos pasa a las mujeres? Primero que el bagaje personal que tenemos no es para el mundo de lo público, y necesitamos tomar para nosotras identificaciones que nos permitan ser de otra manera. Ahora, las tomamos de los que existen en el mundo de lo público que son los varones, y esto es un problema porque lo tomamos de ellos y al mismo tiempo no somos reconocidas por ellos como pares, entonces es un trabajo psíquico muy complejo de identificación con el otro que no te reconoce como parte de sí, pero además eso es más complicado, porque eso quiebra la cadena, también del reconocimiento con las otras mujeres, que es esto de lo que vos hablabas, pues terminamos pareciéndonos muy poco a nuestras madres y menos a nuestras abuelas por lo cual quedamos un poco como huérfanas genealógicas si como dicen los africanos hace falta toda una tribu para educar un/a niño/a. Creo hoy que la idea de que si mi mamá es una ama de casa yo tengo que parecerme a otra o a otro para ser diferente, y tiendo a menos valorar a esa mujer que fue la que me parió y me crió, entonces lo que vemos ya a varios años de trabajar con perspectiva de género es que esto tiene un costo muy fuerte. Entonces para que una mujer pueda ser autónoma de verdad va a tener que valorar a su mamá de otra manera, aunque su mamá sea la campesina iletrada, va a tener que valorizar el capital que esta mujer le dió, porque posiblemente parte de que esta mujer de la segunda generación sea diferente es porque esta campesina le dijo vos tenés y podes ser diferente. Yo no pude, pero vos sí. 

Pero entonces lo tenemos que ver diferente?

Débora: Sí y no, la construcción subjetiva es muy compleja, entonces en lo masculino tienen otras vicisitudes porque, qué le pasa a los varones que no quieren ser patriarcales, de dónde saca el modelo si usted hace un corte generacional, no es pop, rockeros y hippies, de la generación de los 60s hay muchos que no se los aguantan, no quieren ser como los padres, le parecen lo peor, les parecen, como se dice en Argentina, caretas 11 y dicen éste quien se cree que es y estos chicos tiene mas problemas porque son más pegados a las madres que a los padres, entonces, cómo arman su identidad masculina frente a varones a los cuales no se quieren parecer? pero esta problemática es específica de los varones. Vamos a hablar de las mujeres, entonces el problema es que una no puede quererse así misma si 11

careta se usa en jerga en Argentina y en Brasil para designar a quien vive de las apariencias

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no idealiza, aunque sea al dominador. Y ahi tienes un doble problema, porque si vos nunca quisiste ser como nadie no vas a hacer nada, este es un primer paso en la constitución del proyecto personal, pero luego para que sea realmente propio, vas después a tener que decir bueno, ahora sí pero a mi manera, como yo quiera y con mi construcción específica. Óigame que modelo elegir no es universal, para algunas será Simone de Beauvoir, para otras será como Rigoberta Menchú, digo cada cual se arma su altar propio de su idealización, y de lo colectivo, estamos en eso, el movimiento de mujeres es una de las cuestiones. Yo en todo caso dejo mencionado algo que hace parte de las tareas que muchas mujeres del movimiento de mujeres han tomado para sí, son varias cuestiones, primero la necesidad de visibilizar las mujeres, valorar las mujeres para poderlas rescatar del olvido, para poder identificarse con ellas y la otra es soportar esta cuestión de que ya somos varias generaciones de mujeres que queremos emanciparnos o que somos emancipadas, y por lo tanto tenemos que saber que nosotras vamos siendo modelos para las otras mujeres y que somos necesarias aunque nos quieran reventar, porque parte de la rivalidad femenina que se expresa en querer ser únicas, es “querer reventar” a las modelos femeninas de la generación precedente. Yo creo que aquí en el contexto en el que vivimos no solamente se trata de construirnos como sujetos, con toda esa carga que tiene el sujeto femenino, sino que aquí también, cuando leía sobre los efectos de la violencia, es un problema pero también una oportunidad, es como que somos unas sociedad - como dicen las compañeras de Capacitar -, politraumatizadas, cuando encuentras a la mujer con uno de los dramas y vas a hablar de eso y resulta que tiene otra y otra violencia y otro efecto acumulado, entonces la compañera nos ponía el ejemplo de una mujer que acaba de perderlo todo en el huracán de Bache, entonces claro los hombres se encuentran a hablar de la pérdida de la casa, de la tierra, de todo y la mujer dice: mi problema es el insomnio, - entonces pensé que debe estar loca, se salió del tema -, porque mi marido se pasa por la noche a tocarme”, no es un solo trauma, casi siempre el trauma reactualiza una cantidad de violencias que si son diferentes en hombres y mujeres. La psicopatología tiene mucho que ver con eso, casi no lo logramos procesar, uno cuando ya tenemos el otro duelo y el otro trauma encima, creo que es importante esto en momentos como los que vive Colombia donde se ve el nivel y que como toda la sociedad tiene duelos es importante entonces observarlo con perspectiva del género, pero también porque nos permite entonces reactualizar las otras violencias invisibles y elaborarlas y trabajarlas, es una oportunidad digamos también. Yo tengo una nueva propuesta superadora, que es el feminismo mimoso, acá se dice cariñoso, entonces es aquel feminismo que quiere tener a lo mejor de todos los mundos fundamentalmente a la ternura y al amor pero con equidad y libertad, pero para todos y todas. Esa es mi agenda política. Además hay otro tema que yo no lo mencioné, porque como tenemos que hablar, yo fundamentalmente hice una psicopatología del género femenino, y hay un tema que no mencioné porque es uno de los problemas mas terribles de la salud mental de los adolescentes, es el suicidio altísimo, y esto tiene que ver con la falta de proyecto con un histórico social , que nos

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han robado el futuro, entonces esa es la razón por la cual vale la pena seguir adelante, por todas las dificultades que nos toca es esto que yo escuchaba ayer, el derecho a vivir porque se nos da la gana, más allá de si estamos programados en las grandes agendas políticas o no. 

Yo tengo una pregunta producto de la relación con unas mujeres nuestras en Boyacá, es què es lo que hay en la psiquis de la mujer que la lleva a resistir tanta humillación, tanta subordinación, tantos golpes, pero en medio de todo la mujer se ve sin problemas de salud mental aparente? Si en las relaciones con sus hijos hay huellas violentas, pero es más o menos cotidiano, entonces dice uno ¿ Qué es lo que hay en la psiquis de la mujer que la hace resistir tanto, es solamente a la mujer? Sería eso mismo en los hombres? Porque están tan llenas de tantos golpes, tanta violación, tanta violencia pero ahí están sobreviviendo....

Dèbora: Hay algo evidentemente que es la fortaleza del sobreviviente: del campo de concentración, de catástrofes, etc. ahora, los tecnócratas lo llaman resilencia, pero es esta capacidad que tienen los que sobreviven a las catástrofes, esto es algo que hay que estudiarlo, por el otro lado hay resilencias de género y de padecimientos de género y hay toda una construcción de la fortaleza femenina, pero no solamente de la fortaleza femenina, también la fortaleza de muchos subordinados, que tienen armada su estima de sí aunque nos parezca muy loco en relación a resistir la idea de que no me van a congelar, como era el chiste de pepito en mi país, que no me van a congelar, no me van a congelar, bueno esto tiene que ver con una dinámica psíquica, yo no me voy a meter con conceptos muy psicológicos, pero tiene que ver con la valoración de sí mismo, de que no me van a doblegar y esta es digamos es la “parte positiva” o habilidades diferenciales que desarrollan los menos favorecidos en términos de subjetivación de dominación.... 

Yo escuchaba una información o estadísticas de violencia intrafamiliar, sacadas en conjunto con Medicina Legal, de mujeres, hombres, niñas y niños, en relación con los índices de mortalidad, cuyos resultados son muy pares, y en principio uno piensa que deberían ser más altos los de la mujer?

Débora: Algunas se les pondrá los pelos de punta pero yo digo: las mujeres no somos mancas, esto por un lado, esto es una cuestión, pero hay otra cuestión yo no sé si ustedes han trabajado algo o han leído algo del tema de por qué matan las mujeres? y ¿por qué matan los hombres? Hay libros sobre esto y las mujeres, se sabe porque se hace historia en las cárceles y todas estas cosas, dicen que las mujeres matan más por amor que los varones, los varones matan mas a desconocidos, y las mujeres matan más a conocidos que las han sometido a situación de violencia, pero eso tiene que ver cómo es la vida de las mujeres y de los varones cuando de víctimas se trata, ellos es más en el espacio de lo público y la violencia hacia las mujeres es en el espacio hacia lo privado.

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